Los de Gonzalo Arconada, el técnico que va a devolver a los numantinos a la máxima categoría, se impusieron al Málaga 2-1 en un tenso partido marcado por la estrategia y en el que los sorianos sacaron el máximo provecho a sus ocasiones de gol merced al acierto de Carmelo, el goleador del partido.
El conjunto malacitano, que a partir de ahora tendrá que sufrir más de lo esperado para mantener esa segunda plaza ante el acecho de Sporting y Real Sociedad, fue incapaz de hacerse con las riendas del partido, diluyéndose en los últimos metros y acabando el duelo con una hombre menos al ver Wellington una roja directa en un intento de chilena que el árbitro Iglesias Villanueva consideró excesivamente peligroso.
Escasas ocasiones de gol
Julio Álvarez, muy activo en todo el partido, dio el primer aviso para los locales al internarse entre líneas y ser derribado por Rosario. La posterior falta lanzada por el propio centrocampista del Numancia golpeó en la barrera. Ambos equipos se tuteaban e incluso respetaban el juego del rival, siendo el Málaga el equipo que realizaba una mayor presión en el centro del campo sobre los jugadores del Numancia.El portero local Jacobo intervino en pocas ocasiones en la primera mitad ya que los lanzamientos de Paulo Jorge y Rossato no llevaban la dirección de portería. Pero entonces apareció Carmelo, que acertó al rematar de cabeza una falta sacada por Julio Álvarez. Algo sencillo para el canario, ya que se encontraba solo dentro del área pequeña y no tuvo opositor para conseguir el primer gol de los sorianos.
La segunda mitad comenzó de igual modo que la primera, pero pronto cambiarían las cosas, ya que el técnico visitante Muñiz, viendo el desarrollo del encuentro, realizó los primeros cambios del partido sacando a dos jugadores ofensivos.
Y uno de ellos, Gerardo, cuando tan sólo llevaba nueve minutos sobre el terreno de juego de Los Pajaritos, se lo agradeció pronto a su técnico, ya que se fue de cuantos rivales le salieron al paso y su disparo raso cruzado no pudo atajarlo Jacobo.
Pero poco le duró la alegría al cuadro andaluz. Y es que el Numancia, lejos de venirse abajo, dio la réplica a los malacitanos cuando de nuevo Carmelo encaró en solitario a Goitia y, ante la salida de éste, cruzó el balón con suspense, ya que dio en el palo y entró. De ahí al final, querer y no poder del Málaga y serenidad y tranquilidad por parte del Numancia para amarrar un triunfo que les deja con pie y medio en Primera división.
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