lunes, 17 de marzo de 2008

El club mandó un espía para ver a Pavlyuchenko


El Madrid sigue estrechando el cerco en torno al ruso Roman Pavlyuchenko, uno de sus objetivos para ser el sustituto de Van Nistelrooy y Raúl. Rafa Monfort, hombre de confianza de Julen Lopetegui (jefe de los ojeadores del club blanco), estuvo viendo in situ el Zenit de San Petersburgo-Spartak de Moscú que se jugó ayer (0-0) y seguir así las evoluciones del delantero internacional de los moscovitas.

Monfort estuvo presente en el Estadio Petrovsky para ampliar el ya detallado dossier sobre el ariete ruso que maneja Mijatovic, pero no pudo ver la mejor versión de Pavlyuchenko. No vio puerta en los noventa minutos que disputó y su actuación no fue demasiado brillante, ya que apenas tuvo ocasiones de gol, aunque a su favor cuenta que visitaba al vigente campeón del país y que además era la primera jornada de Liga tras el duro invierno ruso, por lo que aún llegó poco rodado al encuentro. Eso sí, en pretemporada dejó muestras de su olfato goleador con un hat-trick en apenas 24 minutos durante un amistoso ante el BATE bielorruso.

No obstante el partido de ayer ante el Zenit no empaña la buena imagen que tiene Pavlyuchenko en la dirección deportiva blanca. El viaje de Monfort a San Petersburgo no es el primero que hacen los ojeadores de la entidad para verlo en directo. Le siguieron en la vuelta de la eliminatoria entre el Spartak y el Olympique de Marsella de la UEFA, donde consiguió un tanto y dio un pase de gol.

Sin embargo, los mejores informes vinieron en el que ha sido su actuación de mayor relumbrón: el doblete que le hizo el pasado 17 de octubre con Rusia a Inglaterra y que dejó a los ingleses fuera de la Eurocopa. Esa actuación le ha hecho subir como la espuma en el mercado, hasta el punto de que el Spartak le renovó hasta 2011 y le subió la cláusula.

Cualidades.

Pavlyuchenko, de 26 años, pasa por ser ahora mismo el mejor talento ruso y hombre clave en el pase de Rusia a la Eurocopa. En el Madrid gusta su potente físico (1,88 metros), su capacidad goleadora, acreditada con sus dos trofeos de máximo realizador en 2006 y 2007 (33 tantos en 51 partidos), y sobre todo su precio, ya que pese a ser un jugador claramente al alza la operación de traspaso no superaría los 10 millones de euros.

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