Conmocionados aún por el despido fulminante de Serra Ferrer como entrenador, los jugadores del AEK de Atenas saltaron al terreno de juego con cierta timidez y eso se notó en los primeros compases. El balón fue a parar a manos del Getafe, que durante el primer cuarto de hora se hizo dueño del encuentro. En esos minutos, Casquero y Pablo Hernández perdonaron el 0 a 1.
Con el paso de los minutos, el conjunto helénico fue sacudiéndose de encima la presión de la UEFA y del Getafe de Michael Laudrup y ya en el minuto 18 se acercó por primera vez al marco visitante con cierto peligro. Aunque no fue hasta el minuto 27 cuando Rivaldo avisó que el encuentro iba en serio. La llegada del brasileño no hizo más que despertar el ritmo de un encuentro que pasó por sus mejores minutos con llegadas a uno y otro lado del terreno de juego. Casquero para el Getafe y Dellas para el AEK fueron los más verticales y peligrosos.
Tras el pase por los vestuarios, el AEK Atenas tomó la batuta del encuentro y de nuevo Rivaldo perdonó el gol de los locales, mucho más atrevidos y despiertos. Los primeros minutos del segundo tiempo nos mostraron a un conjunto local dominador de la situación ante un Getafe que poco a poco se fue haciendo más pequeño.
El punto crítico llegó en el minuto 60, cuando Gavilán se vio obligado a abandonar el terreno de juego inmovilizado y con collarín tras una caída realmente fea.
La lesión y un par de cambios hicieron que el ritmo descendiara considerablemente, sobre todo para el juego del Getafe, que no logró quitarse de encima los nervios. Mientras, el AEK Atenas seguía probando fortuna ante la portería defendida por Abbondanzieri. Y es que fueron sólo los atenienses los que intentaron llevarse la victoria. Los madrileños, mucho más pendientes de las noticias que llegaban de su compañero, fuera de peligro pero traslado a un hospital, se limitaron a dejar pasar los minutos sin encajar un gol y su planteamiento dio resultado. Pese a lo rácano de su juego, una jugada aislada en los últimos minutos permitió al Getafe volverse a Madrid con una victoria que facilita las cosas. De la Red fue el encargado de romper el cero a cero tras un despeje muy inocente de los griegos. Misión cumplida...o eso parecía cuando de un taconazo, el AEK empataba 'in extremis'. El Alfonso Pérez decidirá ahora.
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